Balenciaga, un hito en la moda española

Hace poco, hablando con una amiga le dije: hay moda que pasa de moda y otra que nunca pasa de moda... profundo pensamiento el mío, eh?

Os explico, la moda que no pasa de moda es la Alta Costura y he decidido, de vez en cuando, incluir algún post sobre los grandes de la moda española. Quizás sea por mi formación como historiadora de Arte pero es un tema que me apasiona: el de la Historia. Así que, aquí vamos con la primera entrega: Balenciaga.

Cristóbal Balenciaga Eizaguirre nace en Guetaria (Guipúzcoa). Su temprana vocación le viene por parte de su madre Matilde que trabajaba como modista para importantes familias vascas, entre las que destaca la marquesa de Casa Torres. Es ella la que viendo el gran interés que tenía aquel joven por el mundo de la alta costura decide ser una especie de "mecenas" para Balenciaga. La marquesa le entrega uno de sus vestidos para que él saque los patrones, el resultado debió de gustarle mucho pues a partir de ese momento le encarga sus vestidos a él. A partir de entonces Balenciaga trabajará para familias de la nobleza.

En 1911 entra a trabajar en unos grandes almacenes llamados Au Louvre de San Sebastián y es entonces cuando entra en contacto con el mundo de la Alta Costura parisina.

Años más tarde en 1917 establece su propia casa C. Balenciaga, en San Sebastián, y , al año siguiente se asociará con dos comerciantes donostiarras las hermanas Lizaso.

En 1924 se disuelve la sociedad y comenzará su firma con el nombre de Cristóbal Balenciaga es entonces cuando entran en su taller dos clientas muy especiales: la reina Mª Cristina y la infanta Isabel Alfonsa.

Con la Segunda República la clientela de Balenciaga se ve mermada ya que muchas de sus clientas se ven obligadas a exiliarse, esto provoca que el modisto se replantee su negocio, funda un nuevo establecimiento , esta vez llamado EISA B.E. Costura y abre tres sucursales; una en Madrid y dos en Barcelona.
Al estallar la Guerra Civil Balenciaga se traslada a París y es allí donde presenta su primera colección de Alta Costura.
En la década de los 40 las creaciones de Balenciaga destacan por el empelo de bordados y pasamanería en los trajes de noche.

Es a mediados de esta década cuando participa junto a los mejores creadores de París en el "Teatro de la Moda" una exposición itinerante destinada a reivindicar el papel de la capital francesa como centro internacional de la moda. Está década es muy fructífera para el diseñador ya que en 1947 nace su primer perfume Le Dix y, además , presenta la línea "barril" son creaciones que juegan con el volumen y se caracterizan por el contraste del volumen en la espalda y el talle ajustado al frente.

A estas creaciones de línea "barril" se incorporarán el vestido túnica: un vestido en dos piezas de líneas rectas y depuradas y posteriormente el vestido saco que será una evolución del vestido barril por último, en 1958 crea el estilo baby doll de silueta trapezoidal. Como vemos sus creaciones se basan en líneas geométricas y parecen inspiradas en la escultura.

Y, para finalizar os dejo con dos de sus creaciones más conocidas. En 1960 diseña el traje de novia de Fabiola de Mora y Aragón (futura reina de Bélgica)

Destacar el cuerpo ajustado con escote barco y manga japonesa. Otra cosa interesante es que va guarnecido con una aplicación de piel de visón perfilando el escote, la cadera y la cola que arranca desde los hombros. Este diseño se realizó en los talleres de Madrid.

 

El vestido para Carmen Martínez-Bordiú lo diseña cuando ya ha cerrado sus talleres por lo tanto es una de sus últimas creaciones, con la que os dejo.... hasta el siguiente post!!

 

Besitos